Gracias a la colaboración de IKEA Murcia, Fundación FADE ha donado más de un centenar de peluches y libros infantiles a los responsables del Hospital General Universitario Santa Lucía de Cartagena para que sean entregados los días de Nochebuena y Navidad a los menores hospitalizados en el servicio de Pediatría del centro, de modo que se les pueda hacer un poco más llevadera su estancia hospitalaria estos días.
Junto a los regalos de material para los más pequeños, los voluntarios del proyecto SECUNDA Smile han querido tener un detalle con los enfermos y familiares de las unidades de oncohematología y hematología. Por este motivo, un par de voluntarios de FADE -ataviados de Papá Noel y uno de sus elfos- han ofrecido un recital de música navideña a los enfermos y familiares de las unidades de oncohematología y hematología (U55 y U56) del centro hospitalario. Tras interpretar varios villancicos navideños, los voluntarios de SECUNDA Smile han hecho entrega a los pacientes de un tangram (o rompecabezas) a modo de detalle navideño.
Esta acción solidaria es posible gracias a la generosidad de IKEA Murcia, que ha entregado los peluches, libros infantiles y juegos a la Fundación FADE, que será la encargada de distribuirlos entre los menores y adultos oncohematológicos que pasan la Navidad en los hospitales Virgen de la Arrixaca y Santa Lucía (Cartagena).
Esta iniciativa se enmarca en los proyectos ‘SECUNDA Junior’, de atención a los menores hospitalizados y sus familiares a través del voluntariado; y ‘SECUNDA Smile’, centrado en la atención de pacientes oncohematológicos y sus familiares a través de la acción voluntaria. Además, tiene por objetivo formar con un plus de humanidad a las futuros profesionales sanitarios, acercándoles a la cara más humana de su profesión: el encuentro con la mirada del sufriente, la solidaridad concreta de dar vida, transmitiendo con hechos la enseñanza de Cicely Saunders, fundadora de los Cuidados Paliativos “Tú importas por ser tú, importas hasta el último momento de tu vida y haremos todo lo que esté a nuestro alcance, no solo para ayudarte a morir en paz, sino también a vivir hasta el día en que mueras”.
Actualmente una treintena de jóvenes profesionales y estudiantes de Enfermería y otras carreras biosanitarias participan en este proyecto, desarrollado en la U55 del Hospital Santa Lucía de Cartagena. Debido a las restricciones derivadas de la pandemia, los voluntarios no pueden acudir personalmente al centro hospitalario a realizar su actividad voluntaria, pero con iniciativas como ésta seguimos cerca de los pacientes y sus familias.
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