Gracias a nuestro Programa APORTA, hemos ofrecido 17 acciones formativas centradas en la capacitación profesional y el desarrollo de habilidades sociales durante el primer semestre de 2020
Un total de 182 mujeres en situación de riesgo social han participado en nuestros 17 talleres de formación, durante el primer semestre de 2020, con el objetivo de avanzar en su inserción sociolaboral gracias a la capacitación profesional y el desarrollo de habilidades sociales.
En concreto, hemos impartido a las participantes formación en habilidades prácticas como cocina y repostería o higiene postural con personas mayores, así como las claves para la búsqueda de empleo, cómo afrontar una entrevista de trabajo o realizar un CV, junto a información sobre la normativa laboral vigente.
Estos talleres, que se incluyen dentro del itinerario formativo que les ofrecemos a través del proyecto APORTA, tienen como objetivo mejorar la formación de las participantes y permitirles estar más preparadas para encontrar trabajo.
En esta misma línea, 60 mujeres en situación de vulnerabilidad se han inscrito en nuestra bolsa de empleo, hemos gestionado 28 ofertas de empleo y hemos logrado la contratación de 6 mujeres en situación de desventaja social.
En concreto, gestionamos una activa bolsa de empleo, punto de encuentro entre familias que necesitan apoyo en sus domicilios y de las mujeres que buscan empleo en los servicios de proximidad.
La tramitación de este servicio la llevamos a cabo desde la dignificación del trabajo en el sector doméstico, condicionando la medicación de la Fundación FADE al respeto de la normativa vigente, informando a empleadores y empleados de las obligaciones de ambas partes. Para ayudar en esta tarea contamos con un Manual de consejos y buenas prácticas para empleadores.
Esta iniciativa la materializamos gracias a la colaboración de la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social, en el marco del proyecto APORTA, de inserción sociolaboral de mujeres en situación de vulnerabilidad, donde la formación y la orientación laboral son piezas clave.
Este programa lo orientamos a superar la brecha de género y la precariedad laboral a la que se enfrenta las mujeres con dificultad económica, con el fin último de lograr su empoderamiento. Se trata, por tanto, de que no sólo mejore su situación laboral y socioeconómica, sino también el respeto y la confianza en sí mismas y en sus posibilidades de lograrlo.